Reseña: Plaga - Michael Grant

Título: Plaga
Título Original: Plague
Autor: Michael Grant
Saga: Olvidados #4
Editorial: Molino
Encuadernación: Tapa blanda
Páginas: 448

HAN SOBREVIVIDO AL HAMBRE. Han sobrevivido a las mentiras. La situación sigue complicándose, y el horror distópico va en aumento. Aunque pese a la agitación que han dejado tantas batallas, luchas de poder y divisiones furiosas, se da una calma momentánea en Perdido Beach. Pero los enemigos en la ERA no se desvanecen, y, amparadas por la tranquilidad, las criaturas mortíferas se mueven, mutan y logran liberarse.
La Oscuridad ha logrado por fin alcanzar la mente de su Enemigo y lo controla a través del delirio y la confusión. Una enfermedad fatal muy contagiosa se extiende a una velocidad alarmante, y unos siniestros insectos depredadores aterrorizan Perdido Beach. Sam, Astrid, Diana y Caine están plagados de dudas: no saben si conseguirán escapar, o sobrevivir siquiera, a la vida en la ERA.

Cualquiera diría que, después de derrotar a la Oscuridad, tendrían al fin tranquilidad. Pero nada es tan simple allí dentro. Y este universo no piensa dejarles tranquilos. Ahora se enfrentan a algo que no pueden combatir. Y la pregunta es cuántos tendrán que morir hasta que encuentren la forma de hacerlo. Si la encuentran.

Sam sigue siendo de los mejores de esta historia. Es el que más se arriesga, el que tiene que hacer el trabajo duro y al que después dejan de lado. Y el chaval, como es tan bueno, lo hace y se calla. A pesar de los remordimientos y los problemas de conciencia que eso le provoca después. Creo que en este libro llega a un límite importante. Cae lo más bajo que puede caer (o al menos eso espero). Y eso le da mucho juego al personaje. Sobre todo porque Sam nunca podrá dejar de ser el héroe, de ser el que hace el trabajo sucio, porque es su naturaleza. Me da mucha pena que no le den el valor que se merece.

Alguien que también me ha gustado mucho ha sido Dekka. Para mí mejora mucho. En este libro se la pone a prueba y la chica se comporta con una fuerza alucinante, una valentía digna de admirar. Es una luchadora. Es, además, muy natural y más madura que muchos adultos. Sube en el ranking hasta colocarse en segundo lugar.

Lana también tiene una mejora desde mi punto de vista. La dejamos siendo esta chica solitaria y deprimida, acosada a cada segundo por la Oscuridad. Su trabajo ahora es intentar superar todo eso. Da un buen paso hacia el futuro.

Y luego tenemos a Albert, al que detesto profundamente. Sí, al principio le admiraba porque fue el que hizo lo que yo pensaba que había que hacer, pero ahora abusa demasiado de su poder. Es casi como un dictador, y eso me pone enferma. Es prepotente y creído, camina con la cabeza demasiado erguida. No me gusta.

Astrid también da un paso para atrás. Sin embargo, creo que es una evolución lógica en su caso y por eso no diré que me cayó mal. Astrid creía en la ciencia, en sus conocimientos, en su cerebro y en Dios. Cada día que pasa, se demuestra que en ese lugar nada de eso parece existir. Tarde o temprano tendría que sufrir una crisis. El cambio que se da en ella es de magnitudes astronómicas. Me ponía bastante nerviosa durante la lectura, pero ahora tengo mucha curiosidad por saber hacia dónde la va a llevar todo esto.

Y, aunque me odio por ello, uno de mis personajes favoritos de este libro ha sido Drake. Otro que parecía que había desaparecido del mapa y, de repente, ahí estaba, en el primer capítulo (admito que todavía no recuerdo que fue de él al final del tercer libro xD). Es el personaje con más coherencia de toda la saga. Su malevolencia es tan tangible que me maravilla.

El resto de personajes no cambian mucho en este libro, o salen poco. Mi percepción de ellos no varía mucho. Sí podría destacar un poco a Caine y mucho a Diana. Ambos le darán mucho a la cabeza.

La historia me ha parecido una de las más flojillas. Los tres primeros libros fueron alucinantes, me sorprendí con ellos y por su calidad. En este libro, las cosas que pasan son también impactantes. Una de ellas puede que sea de las mejores que haya podido leer. Pero al final me ha dejado bastante indiferente. Se me antojó como una historia de transición. Aunque no tiene mucho sentido si lo analizas en profundidad.

Desde el primer capítulo se nos presenta ya el problema. Un problema que les llevará al desastre. Hay acción, hay evolución. Sin embargo, esta creo que es más una historia de crecimiento personal. Son muchos los personajes que harán una retrospectiva de los últimos meses y sacarán conclusiones de ellos. Este tipo de historias suelen gustarme mucho, pero aquí ya tenía una idea preconcebida y, como no ha llegado a lo que esperaba, he acabado un poco decepcionada. No obstante, reitero que la “plaga” es alucinante. Una vez más, el señor Grant tira de ingenio y me ofrece algo que me pone los pelos de punta. Toda la parte de Sam es fantástica. Y volvemos a encontrarnos con ese final frenético y trepidante que caracteriza tanto a estos libros. Y, otra vez, la parte final que tiene que ver con Sam es la mejor. Me da mucha rabia que no me haya gustado tanto como la de los libros anteriores.

En la narración no hay ningún cambio. Sigue siendo la misma que la de los libros anteriores. ¿Qué puedo decir? Que el principio lo he leído tan rápido como el resto del libro, algo que me costaba un poco en los anteriores. Además, el autor ha introducido aquí algunos capítulos desde el punto de vista de Pete. Podéis creer que el algo bueno, pero lo cierto es que son tan confusos como esclarecedores. Solo sirven para generar más hipótesis, que son muy bienvenidas. Pete es el personaje que contiene más misterio, y poder desentrañar un poco de este es estimulante.

En definitiva, creo que es el libro más flojo de lo que llevamos de saga. No me ha resultado tan impactante como los anteriores, ha habido cierto relax por parte de los niños. Se me ha antojado más como un libro de transición entre el impacto del tercer libro y la vida que empezará en el quinto. Sin embargo, todo el libro supone un punto de inflexión para muchas personas, por lo que se salva. Su increíble final es el que le sube la nota.