Reseña: La Canción más Bella para mi Enemigo - Beatriz Naveira

Título: La Canción más Bella para mi Enemigo

Autor: Beatriz Naveira

Editorial: Kiwi

Encuadernación: tapa blanda

Páginas: 313

Precio: 9,95 euros

En la bella ciudad conviven humanos y algunos no tan humanos. La gente no lo sabe, pero Heliatón, una organización secreta se dedica a cazarlos y exterminarlos. Marcus es uno de ellos.
Durante una misión es capturado por Aresha, la cantante de moda del momento que lo convertirá en su mascota. Pero las cosas para Aresha no irán como esperaba cuando “adoptó” a Marcus.
Ahora no solo la persiguen los chicos de Heliatón, si no que los licántropos se han unido a la caza, con Gael, su rey, a la cabeza. Pero lo que Aresha no sabe es que en su casa corre peligro, un peligro muy diferente al de ser eliminada.
Corre el peligro de ver como su vida da un giro inesperado.

La historia nos sitúa en la vida de Marcus, un Heliatón que se dedica a cazar seres sobrenaturales. Una noche, su misión es acabar con la vida de Aresha, una vampira peligrosa y muy poderosa. Sin embargo, en lugar de matarla acaba siendo su prisionero, cambiándole la vida por completo.

La historia en sí tiene una buena base. A quién no le gustan los cazadores que libran al mundo de demonios malos, vampiros sádicos u hombres lobos que han perdido la razón. También es atractiva la idea de la vampira que consigue hacerse con el cazador. Sin embargo, para mí se quedó a ahí.

La personalidad de ella no me gustó en absoluto. Ese deje de soy todopoderosa y no tengo ninguna debilidad me sacó de quicio en algunas ocasiones. Además era muy arrogante y orgullosa, una chica con un carácter no muy bueno para hacer amigos. Yo no me llevaría muy bien con ella.

Él está mejor. Es un buen chico, dulce y que sabe escuchar. Es un poco corto y eso a veces me pone nerviosa cuando la situación es muy evidente, pero en general me agradó.

Lo mejor son los amigos de ella. Me gustó mucho Klaus porque es un tío sensato y listo. No dice más de lo que tiene que decir y sabía comportarse. También Blues, un pequeño animalito muy gracioso que se hace amar desde el primer momento. El resto son personajes correctos, pero que no llegaron a dejarme una marca.

El mayor problema que le veo al libro es la repetitividad que tiene con algunas cosas. Hay frases y conceptos que se repiten hasta la saciedad a lo largo del libro y que me hicieron cansarme con la narración. También había algunos diálogos que sobraban o que me parecían muy forzados. Queda a veces como muy amateur.

Otro problema es que la edición tiene algunas faltas ortográficas que me hicieron daño a la vista. Y eso me saca mucho de la historia. Y la letra es tan pequeña que parece que no avances nunca en la lectura. Hubiese preferido un libro un poco más grueso y una letra más normal.

Pero, a pesar de todo esto, la historia es entretenida. Tiene algunos puntos sádicos que me gustaron mucho. Y un síndrome de Estocolmo, mientras él está atado a una cama, que es muy atractivo. El final está totalmente cerrado y, aunque es un poco predecible, correcto.