Reseña: Fusión - Julianna Baggott

*Puede haber spoilers de libros anteriores.*

Título: Fusión

Título Original: Fuse

Autor: Julianna Baggott

Saga: Puro #2

Editorial: Roca

Encuadernación: Tapa blanda con solapas

Páginas: 480

Precio: 17,90 euros

Cuando llegó el fin del mundo, aquellos que vivían en la Cúpula estaban a salvo. En el interior de su mundo de cristal, los Puros continuaron viviendo, sin marcas, sin deformaciones, mientras que los de fuera, libraban una batalla diaria por la supervivencia entre el humo y las cenizas.Tras el secuestro de una joven miserable y después de limpiarla de todas sus fusiones e imperfecciones, la chica solo es capaz de repetir una y otra vez el último mensaje de la Cúpula: Queremos que se nos devuelva a nuestro hijo. Esta chica es la prueba de que podemos salvaros a todos. Si os negáis a escuchar nuestra petición, mataremos a nuestros rehenes. Uno por uno.Willux hará lo indecible para que Perdiz regrese a la Cúpula, incluso si se trata de asesinato. Perdiz acabará por sacrificarse y volver, con la esperanza de poder provocar la caída de la cúpula desde su interior. Lo que no espera es seguir descubriendo secretos escalofriantes sobre su padre.
En el exterior, Pressia, Bradwell y el Capitán se dedican a descifrar secretos del pasado que han encontrado en una de las Cajas Negras, secretos que podrían librar a los miserables de sus fusiones para siempre.
Una aventura épica que arrastra a los lectores de la belleza a la brutalidad, Fusión continúa la historia de dos personas que pelean por salvaguardar su futuro y cambiar el destino del mundo.

Puedo afirmar sin temor a equivocarme que este es uno de los libros más esperados del año. Puro supuso una revelación, una novela difícil de decepcionar y de un corte excepcional. Pero Fusión la sobrepasa con creces. Sin duda la autora se ha superado muchísimo con este libro y deja tras de sí una enorme desesperación y una cuenta atrás agonizante para poder leer el final de una historia fascinante y llena de crudeza.

La historia comienza un tiempo después de los hechos ocurridos en Puro. Nuestros héroes se han separado para poder proteger la verdad y preservar la lucha en caso de que sufran algún ataque mortal. Así, Pressia, Bradwell e Il Capitano están en la sede de la ORS intentando reclutar un ejército; y Perdiz, Lyda e Illia están con las madres, posiblemente el lugar más seguro fuera de la Cúpula.

Tampoco me equivocaré si digo que los personajes de esta trilogía son fascinantes, muy bien construidos y con una fuerza narrativa bestial. La evolución de todos ellos en Puro fue enorme, una evolución que se vio en todos los aspectos del libro, pero aquí siguen creciendo y abrazando cada uno su destino. Pressia conserva toda la fuerza y la determinación que consiguió en Puro, pero los hechos del final de ese primer libro la hacen cuestionarse muchas cosas, como si el amor merece la pena en un mundo lleno de muerte. Su interior está continuamente agitado con la culpabilidad y la incertidumbre, pero jamás se rinde y sigue adelante sin vacilar, luchando por aquello que cree que es justo. Posiblemente sea el personaje que más nerviosa me puso, pero es sin duda una de las mejores protagonistas que jamás tendrá la literatura juvenil.

Bradwell sigue en su empeño por descubrir la verdad y pondrá todos sus esfuerzos en aprender del pasado y llegar al final de lo que realmente pasó para aprender de los errores de la humanidad y que no se vuelvan a repetir. No diría que hay una gran evolución en Bradwell, más bien es un personaje que lo tenía todo muy claro desde el principio, con una meta clara y unos principios muy arraigados, que se limita a seguir ese camino que se marcó hace mucho tiempo. En este libro se ganó mi respeto y mi admiración.

Il Capitano es para mí el que más evoluciona y el que más crece en todos los aspectos en los que una persona puede crecer. Es por el que más sufrí y el que más hondo se clavó en mi corazón. Tanto él como su hermano se convertirán en personajes que recordaré toda mi vida. Pasa de ser el soldado más despiadado de la ORS a no creer nada de lo que dice la cúpula y a ofrecer una vida mejor a todo aquel que se presente voluntario para luchar contra los puros. De la crueldad a la nobleza. Son muchas las cosas que pasan con este hombre y su hermano, mucho más participativo en este libro. Cosas que no puedo decir por motivos obvios, pero solo por conocerle merece la pena leer el libro y seguir con la trilogía.

Perdiz. Al que más le cambió la vida en Puro, junto con Lyda, aunque ella no sufrió los reveses del joven. En este libro se convierte en un chico de una fortaleza increíble y una gran determinación. Ha encontrado su lugar en el mundo y parece estar dispuesto a llevar a cabo la tarea que le ha sido encomendada. Aunque no sabe muy bien cómo hacerlo. De mano de Perdiz descubriremos muchas cosas y, me atrevería a decir, que sus partes son las que más me han aportado y las que más me han sorprendido.

Lyda es un personaje que no me gustó nada en Puro. Me parecía una entrometida y una pava por motivos que no vienen al caso y que se fueron con una de las revelaciones de Puro. Mi percepción de ella ha cambiado y, aunque no es mi favorita, la soporto y la respeto, además de que creo que será muy importante y se ganará mi respeto en el último libro. Ella también crece un montón hasta el punto de sentirse más en casa en el exterior que en la Cúpula. Esto tiene más mérito que lo de Perdiz porque ella no tenía ningún lazo en el exterior y creció dentro perfectamente. Se convertirá en una guerrera fuerte, capaz de sacrificar lo que sea por las cosas que ama y en las que cree.

Los demás personajes van apareciendo y desapareciendo, algunos con cierta relevancia y otros sin importancia alguna. Conoceremos mejor a las Fuerzas Especiales, como trabaja la mente del padre de Perdiz, y algunas personas del interior de la Cúpula que pueden suponer la diferencia en el futuro.

Pero mi personaje favorito, favorito es una caja. Jamás pensé que ese “bichito” sería el que me ganase más profundamente. Fignan es tan mono que no me pude resistir. Me lo imaginé un poco como Wall·E. Un personaje imposible de describir.

La narración, como fue en Puro, se establece en capítulos donde cada personaje recibe todo el peso narrativo. En este libro se lo reparten Pressia, Il Capitano, Lyda y Perdiz. También seguimos con la tercera persona, y cada letra, cada frase, cada párrafo destila belleza, con descripciones vivas y coloridas. Una prosa atrayente y perfectamente conjugada. La única pega que le pongo es que, a veces, la censura de palabrotas genera situaciones ridículas. Quiero decir, hay momentos en que no hay problemas con poner alguna palabra fuerte, pero cuando la situación requiere un taco te ponen un mecachis y se quedan tan anchos. Para mí le quita veracidad y dramatismo a alguna situación que lo necesitaba. Me dio un poco de rabia.

Y la historia, queridos lectores, es tan magnífica que no hay calificativo en el mundo que pueda describirla. ¿Exageración? Tal vez, para gustos colores, pero para mí es una de las mejores historias que nunca leeré. En este libro se supera, se nos mete en situaciones peligrosas que dejan al borde del infarto, revelaciones que ponen los pelos de punta, todo bien conjugado para que no haya puntos negros que le hagan perder realismo a este mundo del futuro, y un final para morirse. Y qué queréis que os diga si un futuro parecido a este es el que yo vislumbro para nuestra Tierra. Pues que lo disfruto como un niño con un juguete nuevo. Además, se nos mete un poco de religión que queda perfecta en el conjunto de este mundo y que le da mucha vida a esta nueva sociedad.

Leedlo. Sería una lástima que os perdieseis esta historia. Os lo digo desde la sinceridad más profunda que poseo.

El horizonte parece desgarrado pero esas hendiduras de garras no son sino una fila de tres árboles raquíticos que dan la sensación de grapar la tierra con el cielo.

Por la noche acechan algunas bestias especialmente violentas, tan mutadas y cruzadas que cuesta decir si estás mirando un jabalí salvaje, un lobo con colmillos retorcidos o una especie de pastor alemán. Lo peor es cuando tienen algún rasgo humano, algún trozo de piel, nudillos, un chispazo huidizo de humanidad en los ojos.