Reseña: Cambiando el juego - Jaci Burton

Título: Cambiando el juego
Título Changing the game
Autor: Jaci Burton
Saga: Play by Play #2
Editorial: Phoebe
Encuadernación: Tapa blanda
Páginas: 304

La mayoría de la gente sigue las reglas del juego, pero Gavin y Liz no son como los demás...
«Ganar a cualquier precio». Ese ha sido siempre el mantra que la agente deportiva Liz Darnell se ha repetido a sí misma durante toda su vida. Cuando va demasiado lejos y corre el riesgo de perder a su cliente más importante, el jugador de béisbol Gavin Riley, Liz se da cuenta de que va a tener que emplearse a fondo para evitarlo. Aunque lo cierto es que tampoco supone un esfuerzo demasiado grande: a fin de cuentas ha seguido cada movimiento del jugador desde que se fijó en él por primera vez… y no fue de una manera precisamente profesional. Pronto Liz se da cuenta de que Gavin está más que dispuesto a seguirle el juego.
A Gavin no le importa nada caer en las redes de Liz. La desea tanto como ella parece desearle a él. Dispuesto a comprobarlo, decide lanzarle una bola curva para ver lo lejos que está dispuesta a llegar para mantenerlo en su cartera. Sin embargo, el amor comienza a formar parte del partido de manera inesperada y ni Liz ni Gavin están preparados para ese cambio de juego. 

Elizabeth lleva meses evitando a Gavin, después de perder a Mike como agente, teme que su hermano siga sus pasos y la despida también. Así que procura no acercarse a él lo suficiente para que pueda hacerlo. Harto de la situación, Gavin decide acorralar a Elizabeth. ÉL no es su hermano, toma sus propias decisiones. Ya basta de tanta tontería. Lo que ninguno de los dos sabe es que esa noche comenzará algo para lo que ninguno de los dos está preparado.

A Elizabeth ya la conocimos en el libro anterior a través de los ojos de Mike. La imagen que dejó no es especialmente buena. Pero lo cierto es que ella es mucho más de lo que todo el mundo cree. Una de las pocas mujeres en un mundo de hombres, no le ha quedado más remedio que ser fría y calculadora, que esforzarse el doble que cualquiera para conseguir solo la mitad. Y esa es la imagen que da al exterior: fría, sin escrúpulos, sin sentimientos, pero brillante, inteligente y con un talento innato. Sin embargo, como todo el mundo, Elizabeth tiene un pasado, y también un pequeño corazoncito que se vio quebrado cuando Mike cortó su amistad con ella. En este libro podremos ver qué hay más allá de su máscara de profesionalidad. A mí es una mujer que me gusta mucho. Todos sabemos que el mundo laboral no es fácil para la mujer, menos en sectores donde todo son hombre, pero ella lucha con uñas y dientes por hacerse un hueco. Orgullo femenino, por mi parte.

Gavin es una estrella del béisbol. Es un tío orgulloso, de gran ego y muy mujeriego. Básicamente, sus aficiones son jugar y salir con mujeres. Todo el mundo piensa que seguirá los pasos de su hermano. Pero lo cierto es que también hay más detrás de lo que se ve. Gavin es un chico inteligente que puede pensar por sí mismo, que puede tomar sus propias decisiones. A mí es un personaje que me gusta porque desprende mucha sexualidad. Es de esos hombres que tienen tanta confianza en sí mismos, que tratan el sexo con la mayor de las naturalidades, que te dejan con las rodillas temblando con solo una mirada. Me gusta ese extremo en este tipo de literatura. Simplemente es joven, guapo y exitoso, y se divierte con ello. Cuando la relación con Elizabeth comienza a ser algo más que un simple cliente/agente, Gavin empieza a cambiar. Empieza a cogerle el gusto a tener la cabeza un poco más centrada. Es un personaje que pasa por una buena evolución en el plano sentimental. Además de forma muy gradual y sutil. Esto es un punto a favor para la autora.

En este libro Mike me ha resultado insoportable. Es lo que tiene conocer mejor a Elizabeth. Comprendo que esté enfadado, que cada vez que la vea se meta con ella. Pero hay un número limitado de veces que una persona se puede disculpar con sinceridad. Tampoco es cuestión de rebajarse hasta el fin de los días. Solo está viendo su lado de las cosas y agarrando el rencor con las dos manos.

Conoceremos mucho a la familia de estos dos hermanos, en especial a la madre, que hará mucho de intermediaria. Es una señora bondadosa con gran corazón. Y a la hermana que queda, una chica que está harta de los deportistas y que solo quiere encontrar a un hombre que deteste el deporte. Y también a un chico, Ty, jugador de hockey, que ya sabéis lo que eso significa: próximo protagonista. No sale demasiado, pero parece divertido.

La historia de este libro está centrada básicamente en el romance, con una buena dosis de crecimiento personal. Dos personas que no buscan el amor, cada uno por sus propios motivos, pero que acaban encontrándolo, recorriendo un camino con el que aprenderán muchas cosas de sí mismos. Hay de todo en el romance. Por parte de ella, tiene que ver más con evolucionar su idea de las relaciones. Ella lleva enamorada de Gavin varios años, pero cree que no tiene nada que hacer con él; y que las relaciones no son más que complicaciones que la dejan a una con el corazón roto, sin excepciones. Él ni se plantea la idea de una relación. Elizabeth simplemente le atrae y está dando rienda suelta a ese deseo. Me gusta que se vea bien que simplemente se están divirtiendo al principio, y que la relación va evolucionando poco a poco, sin que parezca forzado ni instalove. Es una historia muy bonita si la analizas bien. También tiene toneladas de sexo. Escenas muy subidas de tono y con mucha química entre ambos. Lo de divertirse es obvio que se lo han tomado al pie de la letra. También me gustó mucho la parte relacionada con la familia. Son una familia muy unida y es bonito ver esa unión sin condiciones.

Y todo esto estará narrado con una tercera persona que cambia de un protagonista a otro con agilidad. Siempre tenemos el punto de vista de los dos de cada una de las escenas del libro. Un libro que se me hizo muy ameno. Me gustan los romances bonitos, qué le voy a hacer.

Así pues, tenemos aquí un romance con una buena evolución. Con dos protagonistas que tendrán que conocerse a sí mismos y aprender a aceptarse como son. Con una buena relación entre el mundo del deporte de élite y la vida cotidiana que hay detrás. Ha sido muy bonito. 

*Agradecimientos a la editorial