Reseña: Ángeles Caídos - Susan Ee

Título: Ángeles Caídos
Título Original: Angelfall
Autor: Susan Ee
Saga: Penryn y el fin del mundo #1
Editorial: Gran Travesía
Encuadernación: Tapa blanda
Páginas: 368

Tras una guerra entre los humanos y las tropas angélicas, en un mundo devastado por el miedo y la superstición, unos ángeles guerreros se llevan consigo a una indefensa niña, pero Penryn, su hermana de 17 años, hará lo que sea para recuperarla.

El fin del mundo ha llegado de manos de los ángeles. Penryn se oculta con su hermana y su madre en un bloque de apartamentos. Hasta que decide que ya no es seguro y que ha llegado el momento de cambiar de ubicación. Esa noche, su hermana es secuestrada después de ser testigos del intento de asesinato de un ángel por otros de su especie. Ahora, este ángel moribundo será su única oportunidad para encontrar a su hermana.

Penryn es una protagonista que me ha gustado mucho. Una chica que hace mucho tiempo que aprendió a valerse por sí misma. Con una hermana en silla de ruedas, una madre con problemas mentales y un padre que se marchó, Penryn tuvo que madurar y echarse el peso del mundo sobre sus hombros. Es una chica dura, capaz de lo que haga falta por proteger a su familia. Alguien que ha tenido que aprender a moverse en un mundo posapocalíptico donde escasea la comida, la corriente eléctrica es intermitente y todo lo que antes eran artículos de primera necesidad son ahora un lujo. Si consigues encontrarlos. Es una chica con carácter, determinada, aunque tal vez demasiado curiosa también. Una luchadora con valor, aunque con un toque asustado que le da más realismo el personaje.  

Raffe será el ángel que desencadena toda la trama. Es un ángel joven, increíblemente guapo y con un ego capaz de llenar el océano entero. Es majestuoso, con un gran porte. Aunque le falla ese pequeño defecto que tienen los ángeles de pensar que los humanos no somos más que pequeños insectos. Estar con Penryn le pondrá un poco el mundo en perspectiva. A mí me ha resultado muy divertido. Su aguante, su estoicismo que sacaban de quicio a la pobre chica. Es un ser tremendamente frío, con el que he disfrutado mucho cuando dejaba entrever un poco de su auténtico carácter. Tengo mucha curiosidad por el Raffe que será en el segundo libro.

Un personaje que me ha resultado muy interesante es la madre de ella. La mujer se medica porque afirma que hay demonios que le dicen cosas. Con todo esto del apocalipsis, ya no hay pastillas disponibles, lo que hace que a veces sea una mujer normal, y otras una persona cruel salida de una pesadilla. Después de leer todo el libro, me pregunto si los demonios no serán un poco más reales de lo que todo el mundo pensaba.

A lo largo del libro, irán apareciendo una gran variedad de personajes que nos ayudarán a comprender la realidad de este nuevo mundo. Tanto humanos como ángeles. Porque, a veces, cuando pasan este tipo de cosas, el ser humano es más peligroso que el invasor. Ha sido muy interesante. Mucha variedad de carácteres, que creo que le han aportado mucha riqueza al conjunto del libro.

Había oído muchas cosas sobre este libro antes de leerlo. Todas increíblemente buenas. Puede que yo haya tenido algunos atenuantes, que hagan que mi opinión no sea del todo objetiva. Pero el libro no me ha parecido tan magnífico como me habían hecho creer. De todos modos, es cierto que es un muy buen libro con una muy buena historia. No tanto, pero se queda cerca, la verdad.

La historia está plagada de acción desde el primer capítulo hasta el último. Hay algunos capítulos de recreo aquí y allí para hacer de transición, pero, en general, es todo acción constante. La ambientación es fantástica: lo mejor de un apocalipsis clásico, con sus ángeles y todo. Con buenas descripciones, pero sin pasarse. En ese sentido estoy muy satisfecha. El romance ha sido muy sutil, y por eso creo que ha sido muy bonito. Nada de amores a primera vista, ni fascinación ni nada. Simplemente un acercamiento paulatino entre dos personas que están pasando por un mal momento, y que están trabajando juntas para conseguir un fin. Porque es sutil, pero no les lleva mucho tiempo. Sin embargo, puedo entender que surja algo cuando se está tan al límite emocionalmente. Así que otro punto para el romance.

Durante todo el libro ha habido un buen ritmo. Son muchos los interrogantes que se nos plantean al principio del libro. Y todavía más cuando acabamos. Hay muchas sorpresas, pequeños descubrimientos que me gustaron mucho. Pero realmente no se nos cuenta nada, sino que, gracias a un final de infarto, se nos presentan todavía más dudas. Es uno de esos finales que te exigen tener el libro siguiente entre tus manos.

La narración es una primera persona del presente de manos de Penryn. Ya sabéis lo mucho que me gustan estas narraciones, porque hacen de la historia algo actual y contundente, ahora. Y también hacen más cercanos a los protagonistas. En ese sentido todo muy bien. Son capítulos cortos, con una narración bastante directa, que hace que la lectura sea muy fluida y amena. El libro se lee muy rápido, y se disfruta todavía más. Y aquí es donde llegamos al problema que yo tuve. No sé si la editorial hizo algún tipo de corrección cuando el libro pasó de Latinoamérica a España. Si la hizo, el mío vino directamente de allá. ¿Qué pasa? Que tienen una forma diferente de expresarse, algo que, en algunos momentos, incluso conseguía sacarme de la historia. Además, cosas que para ellos son habituales, para mí son errores gramaticales en toda regla. Y lo cierto es que se me ha hecho algo raro en algunos momentos. Creo que eso ha sido contraproducente en mi caso. Había pasajes muy extraños de leer. Pero, aun así, el libro es muy bueno.

Un muy buen comienzo de trilogía, lleno de acción y de misterios, de sangre, espadas y ángeles invasores. Una historia con un ritmo excelente, que sienta las bases para una continuación que se prevé todavía mejor. Con una protagonista de fuerte carácter y un romance sutil y muy bonito. 

Pero lo que realmente me convence de que llegó el Apocalipsis es el crujido de los teléfonos móviles bajo mis pies.