Reseña: The Raven Boys: La Profecía del Cuervo - Maggie Stiefvater

Título: The Raven Boys: La Profecía del Cuervo

Título Original: The Raven Boys

Autor: Maggie Stiefvater

Saga: The Raven Boys #1

Editorial: SM

Encuadernación: Tapa blanda

Páginas: 424

Cada año, la noche de San Marcos, Blue Sargent acompaña a su madre al camino de los espíritus para ver a los que morirán en los siguientes doce meses. Sin embargo, este año es distinto: Blue, la única de su familia que no tiene facultades adivinatorias, ha visto a uno de estos espíritus, y eso solo puede significar que es su amor verdadero o que lo va a matar.

Él se llama Gansey y es el estudiante más rico del colegio privado más elitista de la zona, la Academia Aglionby, cuyo emblema es un cuervo que todos los estudiantes llevan bordado en el jersey. Junto a Adam, un estudiante brillante, celoso del poder económico de sus compañeros; Ronan, un chico con problemas emocionales desde la muerte de su padre, y Noah, el observador taciturno que apenas habla, forman los chicos del cuervo, y están empeñados en descubrir la ubicación de la tumba del último rey galés, Glendower, el Rey Cuervo.

Blue sabe que debe mantenerse alejada de ellos, porque los chicos del cuervo siempre traen problemas. Aunque nunca podría imaginarse el siniestro y oscuro mundo que los rodea, donde la magia dejará de ser un juego para convertirse en una amenaza mortal.

Blue ha vivido siempre rodeada de cosas paranormales. Toda su familia está llena de videntes y en su casa convive con cuatro mujeres que son capaces de ver el futuro y hablar con los muertos. Pero el don se la saltó a ella. Todo lo que Blue puede hacer es amplificar los poderes de los demás. Hasta que una noche ella misma ve un espectro, la proyección de alguien que morirá en el próximo año. Y que ella pueda verle solo puede significar una cosa. Que es su verdadero amor o que va a matarle. Tampoco ayuda que desde siempre le hallan dicho que está destinada a matar a su verdadero amor con un beso.

En esta historia llena de magia tenemos como protagonista a Blue. Ella es una chica de lo más normal (si obviamos los poderes de su familia), de clase media/baja, que va al instituto cada día y se las apaña para ser feliz y estar satisfecha. Aunque en el fondo tiene cierto resentimiento por ser la única sin poderes. Tampoco tiene ningún problema (mental o de conducta) relacionado con no haber conocido a su padre, que se marchó nada más nacer ella. Hasta que su vida sencilla comienza a complicarse y ella decide que ha llegado el momento de pasar a la acción. Y todo esto le permitirá conocerse más a ella misma.

Las mujeres con las que vive son todas fantásticas. Abarcan todo el espectro de posibilidades de carácter del ser humano. Su madre no es una madre normal, pues siempre le está dejando muchas libertad, que viene por la gran confianza que tiene en ella. Es la voz de la razón. Persephone es la tranquila y dulce, observadora, tiene su propio ritmo de vida. Cala es más agresiva, con más temperamento, un poco más gamberra. Orla es como una adolescente popular, con su propia linea de telefono para la videncia. Y, por último, está Neeve, hermana de su madre, vidente con un programa de televisión y varios libros sobre el tema en su haber, acaba de irse a vivir con ellas una temporada por un motivo que Blue desconoce. Es la más misteriosa de todas.

Por otro lado, tenemos al grupo de chicos que trastocarán la vida de Blue. El principal es Gansey, un niño asquerosamente rico que no le da ninguna importancia al dinero. Para él la fortuna de su familia es como una extremidad más, cuando lo necesita lo usa, pero no desde el derroche. Gansey está obsesionado con las lineas ley, la energía, el cuerpo de un caballero muerto cientos de años atrás sobre el que pesa una leyenda. Una leyenda que, de resultar cierta, podría cambiarle la vida. Es un chico en extremo complicado, con una máscara que le protege del exterior. Hiperactivo y siempre preocupado por ayudar a los demás y arreglar el mundo. Me muero por conocerle más profundamente.

Ronan, al igual que él, está podrido de dinero, pero todo está en manos de su hermano mayor tras la muerte de su padre. No podrá acceder a él hasta que cumpla dieciocho años y si asiste a la escuela privada y de prestigio de la zona: Aglionby. La escuela a la que van todos los chicos del grupo. Nosotros conoceremos al Ronan después de la tragedia, lleno de odio, agresividad y poco interés en nada. Es arrogante y seguro de sí mismo, tal y como se espera de un niño rico. Luego tenemos a Adam, un chico que vive en un parque de caravanas (aunque la suya es una casa prefabricada) y que estudia en Aglionby gracias a una beca parcial y para poder ir a una buena universidad. Su vida no es nada fácil. Es una lucha continua, día a día, estudiando mucho y trabajando más para poder pagarse todo lo que necesita. Es un chico muy orgulloso, que solo quiere servirse de su esfuerzo para salir de su propio pozo. Y finalmente, está Noah, el misterio supremo de la novela. Un chico callado, que simplemente les sigue a todas partes. No sabemos nada de su vida personal.

El libro peca un poco de introductorio. La historia que hay en sus páginas nos habla sobre un mundo paranormal que todos conocemos, pero desde la veracidad. Nos habla de un mundo de leyendas y la búsqueda de un grupo de jóvenes para llegar hasta el fin de una de las tantas leyendas que pueblan el mundo. Pero luego la historia comienza a complicarse, a llenarse de destino, de intrigas, de suspense y de sorpresas. El objetivo que parece el principal de la historia empieza a perder importancia para dar paso a otros hechos más oscuros y peligrosos. Además, es también una historia en la que se nos cuenta las diferentes vidas de un grupo de jóvenes, vidas que existen y que nos hacen reflexionar. Es una historia bastante completa, pero de la que todavía queda mucho para llegar a su conclusión.

La narración es en tercera persona, cambiando de narrador según sea conveniente, aunque la mayoría del peso recae en Blue y Gansey. Es una escritura muy fresca y ágil, que avanza con fluidez por los hechos. Ha sabido llevar muy bien los tiempos y el ir desvelándonos pequeños detalles que nos animan a seguir leyendo, ocultando otros que animan todavía más, fomentando la curiosidad del lector.

Así pues, tenemos aquí un buen inicio de saga, que es más de lo que parece ser, aunque algunos aspectos se quedan demasiado introductorios. Con buenos personajes muy bien definidos y una historia paranormal llena de sorpresas, Maggie ha escrito un libro que despierta la curiosidad y una terribles ganas de saber cómo acabará todo esto.