Reseña: R y Julie - Isaac Marion

Título: R y Julie

Título Original: Warm Bodies

Autor: Isaac Marion

Editorial: Montena

Fecha de Publicación: Noviembre 2011

Encuadernación: Rústica con sobrecubierta

Páginas: 303

Precio: 14,90 euros

Una oscura fábula de amor en la tradición de Romeo y Julieta que nos recuerda qué nos hace realmente humanos.

R es un zombi que no recuerda nada de su vida anterior, ni siquiera su nombre. Un día todo cambia. Durante una cacería, se topa con un grupo de jóvenes armados, y logra atrapar a uno. Cuando comienza a devorarlo, una oleada de recuerdos lo invade, en los que ve a Julie por primera vez. Cuando vuelve en sí se da cuenta que ella está allí mismo, defendiéndose de los zombies. Para protegerla, la lleva a un aeropuerto abandonado. Desde que la conoce, siente que está cambiando. Vuelve a sentir. Ambientada en un mundo post apocalíptico, donde humanos y zombies se temen mutuamente, es una novela sobre el poder que tienen el amor, la compasión y la ternura para cambiar el mundo.

El apocalipsis ha llegado. La Tierra está acabada y sólo quedan un puñado de humanos que no durarán mucho, porque lo único que hay ahora en la Tierra son zombis. Y los zombis comen… humanos. Este es el punto de partida de una historia deliciosa que me ha hecho disfrutar como una niña pequeña con un caramelo.

Esta historia nos la cuenta en primera persona nuestro amigo R. R es un zombi. Pero es difícil pensar en él como un zombi. El pobre no recuerda nada de su vida anterior a la conversión, ya no sabe leer y a penas puede hablar. Su cerebro funciona con lentitud a la hora de expresar con palabras sus pensamientos (común a todos los zombis). Pero tiene pensamientos y muchos. Eso es lo que hace difícil pensar en R como un ser putrefacto como cerebros sin un ápice de humanidad. La voz de R es fascinante y elocuente. Cada palabra de la narración hacen del texto algo brillante y lleno de reflexiones de una persona que está muerta pero que no quiere dejar de vivir. Me ha gustado mucho la forma que tiene de escribir Isaac Marion, muy vistoso y con mucha belleza. Eso hacía que me riese todavía más.

La mayoría de zombis son personajes secundarios. Evidentemente. Sólo uno se destaca por encima de los demás y es M, amigo de R. Por influencia de este último, M comienza a pensar por sí mismo y a experimentar los cambios que R comienza a experimentar el día en que decide salvar a Julie de la muerte.

Ese es el desencadenante de esta historia. En una cacería, R conoce a Julie a través de un cerebro y siente unas ganas tremendas de salvarla y quedársela para él. Esto provoca más situaciones graciosas. Y conocemos así a una persona que tendrá que dejar atrás sus prejuicios después de conocer a este chico muerto. Julie es un personaje complejo que ya no tiene nada por lo que vivir, que ya no cree en la humanidad, pero que se aferra a ella, de una forma un poco inconsciente creo, y que será salvada de varias formas diferentes por R.

Lo mejor de este libro es la sociedad zombi. Os prometo que jamás me he reído tanto leyendo un libro. Estos zombis se organizan en comunas. Están liderados por los más ancianos de ellos que no son más que huesos. Estos ancianos los emparejan, los casan, les dan hijos y de vez en cuando hacen oficios “religiosos”. Esto, por sí mismo, no es gracioso. Es la situación, la forma en la que se mueven, como gruñen lo que a mí me pareció divertido. Y ya no os cuento la forma que tienen de “hacer el amor”. Igual a vosotros no os parece nada gracioso, pero yo me lo imaginaba y me entraba la risa. Ese contraste entre la muerte y la organización como si estuviesen vivos. Entre la muerte y al capacidad de raciocinio y pensamiento brutal de R.

Como ya os he dicho, la narración me pareció exquisita y me ayudó a leer el libro a la velocidad de la luz. También la decisión de R de hacer algo respecto a su monótona existencia me empujaba hacia delante. La “viveza” de R te ayuda a devorar un texto que me pareció muy original y muy bien contado. Tenía mucha curiosidad por saber cómo acababa la cosa.

Hay quien dice que el romance es poco creíble por ser R lo que es. Yo opino todo lo contrario justo por ser R lo que es. Su cuerpo puede estar muerto, pero su mente está viva. Y os aseguro que lo difícil es creer que R está muerto. Así que no me molestó en absoluto.

Aviso que también hay alguna situación que os puede resultar asquerosa. Me refiero a cuando se alimentan. Pero esto también queda eclipsado por la forma de narrar de R. Es tan elocuente y tan racional que parece que esté comiendo macarrones y no un cerebro humano sin cocinar.  Creo que merece leerlo sólo por esta forma de narrar que tiene Marion.

El libro sólo tiene una pega. Una cosa que quería desesperadamente y que la autora no me dio. No tiene importancia, pero a mí me fastidió un poquito.

Así que, si queréis una historia de zombis diferentes, con un protagonista que no os dejará indiferente y que os haga reír (espero que lo haga). Leedlo. De verdad que no tiene desperdicio.

Puntuación