Título: One Night That Changes Everything
Autor: Lauren Barnholdt
Editorial: Simon Pulse
Fecha de Publicación: junio 2011
Encuadernación: Rústica
Páginas: 242
Precio: 7,03 euros
Eliza es una chica despistada. Casi siempre tiene alguna pertenencia en paradero desconocido, aunque siempre acaba apareciendo al final. Esta vez le ha tocado el turno a su cuaderno púrpura. No supone una novedad de no ser por la importancia que tiene ese cuaderno, porque no es un cuaderno normal. En él, Eliza escribe las cosas que haría si no le dieran miedo, vergüenza o tal vez ambas cosas. Nadie en el mundo puede leer ese cuaderno y por eso está tan desesperada por encontrarlo.
Ese fin de semana sus padres se han marchado de viaje y Eliza ha montado una “fiesta” en su casa con sus dos mejores amigas. Pero nada saldrá como ella quiere. Cuando más desesperada está y con sus amigas preguntando por el dichoso cuaderno, Cooper llama a su móvil. El mismo chico con el que cortó unas semanas antes y que la dejó completamente destrozada.
Con todo el descaro del mundo, Cooper le pide que vaya hasta una discoteca del centro de la ciudad en un atuendo sexy. Eliza se niega en redondo, pero Cooper afirma tener su cuaderno púrpura.
Lauren Barnholt nos narra esta historia que transcurre en un solo día en primera persona. Un acierto porque así tampoco nosotros sabemos más de lo necesario y podemos implicarnos más con el personaje principal e ir haciendo nuestras propias conclusiones con respecto a los hechos a medida que la acción va pasando.
Tenemos ante nosotros a una protagonista tímida y con muchos miedos que tienden a ser sobrevalorados. Por supuesto no todos, lo que da más interés a los hechos. Los primeros de los que tenemos constancia ni siquiera los considero miedo, es más bien vergüenza y son tan típicos que ayudan a sentirse un poco identificado con Eliza.
Veremos además dos versiones de Cooper que nos harán calentarnos la cabeza. La que vemos a lo largo de la noche y la que la protagonista tiene en su cabeza. Él le hizo una putada antes de cortar y eso es incapaz de olvidarlo, pero a la vez sigue coladísima por él.
Barnholdt nos habla del amor y del saber perdonar. Sobre todo del dar una oportunidad al diálogo y dejar que una persona se explique antes de juzgarla. Nos habla del acoso por diversión y de lo mal que se sienten las víctimas. De la frialdad de la sociedad y de no querer ver la realidad porque es demasiado para uno mismo. Se supone que también recalca la importancia de la amistad, pero voy a discrepar un poco. Hay momentos que la amistad de las amigas brilla por su ausencia. No es que no la quieran y no la estén apoyando en esos momentos difíciles, pero a veces piensan demasiado en ellas mismas cuando tan sólo deberían estar apoyando a Eliza, que es la que lo está pasando peor esa noche. Doy por hecho que no me estoy explicando con mucha claridad, pero es que no quiero ahondar demasiado en el asunto para no desvelar demasiada información del libro.
En definitiva, es un libro ágil y ameno que me gustó mucho. No parece muy complicado cuando lo lees, pero si profundizas te das cuenta de que tiene un buen trasfondo. Me lo pasé muy bien con él.
Jo, pues no tiene mala pinta para nada, este queda anotado.
ResponderEliminarGracias por la reseña guapa, un besote!!
Me llama la atención :) Me apetece una lectura sencilla y amena de vez en cuando, veré a ver qué tal
ResponderEliminarLo tengo pendiente :)
ResponderEliminarPues a hacerse con él, chicas!
ResponderEliminarY gracias por dejar el comentario ^^
pues el libro pinta demasiado bien!!
ResponderEliminary la portada me parece preciosa
besos